La superstición del nazar (ojo) promueve la idea de que una apariencia maliciosa es lo suficientemente fuerte para provocar un gran desastre en la vida del otro.
Nuestros ojos son la apertura y el portal hacia nuestra alma que refleja nuestras emociones, el ojo es el punto más poderoso en el que el cuerpo puede emitir energía, por tanto, el mal de ojo tiene enormes poderes, provocando un gran temor de atraer la “mala suerte”, atrayendo energías negativas y hasta enfermedades mentales o físicas, separaciones o discusiones en casa.
El simbolismo del ojo se asocia al Sol. A lo largo de la historia se han utilizado amuletos en forma de ojo, como excelentes aliados para poder librarse de todo tipo de enfermedades y males, protección contra el “mal de ojo”, envidias, malas vibraciones de otras personas, celos, habladurías, peligros de cualquier tipo (robo, incendio, amenazas, mal trato)
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